Situado en el 22@ de Barcelona, el primer edificio de oficinas construido en madera de España ya es una realidad. Wittywood tiene una superficie total de 3.600 metros cuadrados, de los cuales unos 2.500 son de oficinas. El uso de la madera como único elemento estructural ofrece múltiples ventajas: la principal, su bajo impacto medioambiental. 
  
La arquitectura sostenible está empezando a dejar de ser una tendencia para ser una realidad. En los últimos años, está dando salida al incremento de la preocupación social -y del sector inmobiliario- sobre el cambio climático y el futuro del Planeta.
 
La última muestra de ello es la construcción del primer edificio de oficinas construido en madera, uno de los materiales naturales con más salida en esta era sostenible y que destaca por su bajo impacto medioambiental. Wittywood ubicado en pleno centro del distrito barcelonés del 22@, marca un hito. 
 
El uso de la madera como único elemento estructural en este nuevo inmueble ofrece grandes ventajas, sobre todo reduce su impacto medioambiental. Y lo dicen los datos: la construcción en madera necesita 24 veces menos energía que la construcción tradicional. Además, trabajar en un entorno como este aumenta la creatividad, aporta equilibrio y reduce la sensación de estrés. 
 
Y es que este nuevo edificio de oficinas nace para crear un entorno de trabajo natural centrado en el bienestar de todos los empleados y sentar las bases de lo que será el futuro de los nuevos puestos de trabajo. Wittywood suma 3.600 metros cuadrados, de los que 2.500 son oficinas, y está dividido en 5 plantas y dos sótanos. El resto son espacios de usos complementarios donde destaca la gran luminosidad. 

Este proyecto combina los acabados de gran calidad con las últimas novedades en cuanto a sostenibilidad y tecnología. Se trata de ser no solo el primer edificio de oficinas hecho de madera, sino romper el mercado con un diseño innovador que sea único y acogedor. 
 
De hecho, según el informe "Tendencias inmobiliarias CBRE", un 68% de las personas prefiere trabajar en un espacio de oficinas de madera antes que en uno convencional. Es más, con la madera como elemento central de la construcción, se estima que la producción aumente en un 14%. 
 
Su estructura es de madera contralaminada y madera laminada encolada  para poder conseguir la mínima huella ecológica. Y su decoración con paneles de madera aporta una apariencia especial y natural. Por otro lado, las superficies de las paredes de las terrazas de la azotea están acabadas con el papel Luna Layer, fabricado con abeto nórdico con pequeños nudos redondos. Totalmente especial, fresco, moderno y natural. 
 
Y, en cuanto a su climatización, el edificio usa una red urbana de distribución de calor y frío que hace uso de fuentes de energía residuales. Así, disminuye la emisión de gases de efecto invernadero y mitiga el efecto "isla de calor".